Pasantía en Nicaragua 2019
Pasantía en Nicaragua 2019

Pasantía en Nicaragua 2019

Durante los primeros días de la Pasantía en Nicaragua, con colegas de Vitaludens, Puntos de Encuentro Nicaragua, Redmas Nicaragua, Decidamos HN y México y Caribe Jóvenes.

De qué va

El encuentro entre 3 miembros de México y Caribe Jóvenes, A.C., junto con los colegas de Puntos de Encuentro y otras organizaciones que pertenecen a la RedMas, Vitaludens y el compañero de Honduras, de la organización Decidamos HN, fue entretenida, divertida, enriquecedora y muy reflexiva.

Para esta actividad se tomaron en cuenta tres aspectos a cumplir, los cuales se pensaron para aportar mayor compromiso en este acercamiento.

El primer criterio de participación a los participantes, fue que se llevara a cabo una reunión estratégica donde se compartirían las áreas de oportunidad y las fortalezas que principalmente los colegas de Puntos de Encuentro y la RedMas han podido identificar durante los años que han trabajo con grupos de hombres; el segundo plano era, con apoyo de Puntos de Encuentro, construir una metodología de intervención con grupos de hombres para la facilitación y/o co-facilitación por parte de los pasantes de México y Caribe Jóvenes, A.C. Para la tercera etapa se contempló llevar a cabo una serie de retroalimentación reflexiva, donde se compartirían los aprendizajes obtenidos durante el trabajo de campo, así como de dar píe a la creación de un vínculo de acercamiento más óptimo entre las organizaciones de México, Honduras y Nicaragua.

Cuáles fueron los aprendizajes

Este evento le permitió al equipo de México y Caribe Jóvenes, A.C., reforzar sus conocimientos, así como replantear aún más sobre las formas de cómo crear las condiciones necesarias para el acercamiento con grupos de hombres, en nuestra labor diaria.

Durante la estancia pudimos adentrarnos en una pequeña parte de la vida Nicaragüense, mirando desde el entorno en que se desarrollan, particularmente de aquellos hombres que estuvieron participando como escuchas durante las actividades en comunidad; conocimos aún más de cerca el contexto político en el que se encuentra el país, lo que nos llevó a reflexionar con respecto a los comportamientos de algunos miembros de la población.

Vimos que los hombres, cuando se crean las condiciones para su involucramiento por medio de metodologías participativas, incluyentes y con enfoques de género y no violencia, pueden ser receptivos y muy conscientes de que trabajan al lado de otros hombres y que quizá no son de su misma condición económica, académica o etaria, pero que los respetan, lo que arroja como resultado que no rechacen o minimicen las participaciones ni la forma de pensar de los adolescentes que estuvieron presentes e interviniendo cuando era momento de que tomaran la palabra. Este elemento del respeto le dio más poder a las palabras y miradas juveniles que se encontraban presentes en los grupos, lo que de igual forma observamos que fortaleció en cierta medida su confianza y empoderamiento. Fue muy interesante descubrir que la razón principal del acercamiento con los hombres por parte de Puntos de Encuentro, para la conformación de un grupo de sensibilización, es porque las mujeres que viven en los mismos círculos familiares donde ellos se desarrollan, son las mismas que incentivan a su participación en espacios de reflexión, ya que principalmente son ellas las que se involucran en primera instancia en movimientos o actividades que conllevan a fortalecer su liderazgo y toma de decisión para contribuir en la construcción de realidades distintas a las que viven cotidianamente, inmersas en violencia.

Conclusiones

Fue de mucho aporte poder convivir y reflexionar en conjunto con los colegas, esto permitió agregar un bloque más al compañerismo y confianza que se ha consolidado desde que nos encontramos. Creemos que fue un buen acierto llevar a cabo esta pasantía al lado de personas locales, que han visto las problemáticas de su país y han sabido encontrar estrategias para construir el cambio que desean, por una Nicaragua libre de violencia, no solo machista estructural, sino también sistémica. Sin duda esta experiencia nos ayuda a preguntarnos ¿qué estoy haciendo para contribuir en la erradicación de la violencia machista en mi ciudad? ¿qué estrategias y mecanismos aplicar para llegar a hombres jóvenes y adultos?, muchas dudas y demasiadas inspiraciones para ir encontrando en este andar de realidades, esas alternativas eficaces para la sana convivencia.

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